TODOS LOS CAPÍTULOS

miércoles

Capítulo 5: SEGUNDAS OPORTUNIDADES...

 -¡¡¡ 50 rosas me ha mandado a mi trabajo!!!
-… Más doscientos mensajes de arrepentimiento al día, más cartas de remordimiento, frases de perdón, etc., etc. –interrumpía Mel, quien por su amiga explicaba al resto de chicas las cosas que Jorge llevaba semanas haciendo para recuperar a Susana.
-¡No me lo puedo creer! ¿Y qué vas a hacer? –Lucy dejó de inmediato de masticar la bollería que desayunaba.
-No  lo sé –aseveró Su, pidiendo consejo entrelíneas a sus amigas.
-Yo lo tengo claro: no vuelvas… Segundas partes nunca fueron buenas, te lo digo por experiencia –contestó rápidamente Mayte.
-Mira si hay algo que en esta vida mata es la duda. Sabes que para mí es muy fuerte que vuelvas con Jorge porque es el mejor amigo de Iván y de alguna manera significa volver a saber de él, pero también sé que si tuviera una segunda oportunidad no querría morirme sin saber si lo nuestro hubiera funcionado –Mel se debatía en un mar de dudas ante la situación.   
-Piénsalo bien muñeca, pero no te precipites, anda con pies de plomo, hazte valer y deja que tu corazón dicte –Lucy aconsejó sabiamente a su amiga.
(…Tres meses después… y de volver con Jorge)

-¡¡Hijo de puta!! No lo entiendo chicas. Osea que se vuelve loco para volver conmigo, me recupera, volvemos a tener una relación estable y bonita, nos vamos de vacaciones, insiste para que vuelva a entrar en su casa, me intento entender con su amiguito Iván al que quiero matar cada vez que le veo,  hasta follábamos más… Y de pronto un día me deja por mensaje por que sí. Mejor dicho: ¡¡Me vuelve a dejar!!
-¡Flipo!, -aseveraron las tres chicas al unísono y sin poder cerrar la boca.
-Y encima te dice que te deja porque no va a poderte hacer feliz, ¡que morro! –de la sorpresa a la indignación hay un paso como se denota en la cara de Lucy.
-¿Es definitivo?, preguntó Mayte.
-Sin vuelta atrás.
-Entonces cariño lo que tienes que hacer es pensar que lo has intentado hasta el final, que han demostrado que son una panda de niñatos, que no nos merecen y que Dios o la Justicia Cósmica nos deparará algo mucho mejor –consolaba Mel a su amiga mientras la besaba como una abuela…
-Pero esta vez la rabia y la impotencia se han apoderado de mí, ¿cómo me ha podido engañar dos veces?, ¿cómo no me di cuenta de que las personas no cambian?, ¿cómo pude volver a jugar un juego que sabía que no era el mío?
-¡Porque eres mujer! –contestaron sus amigas orgullosas.

1 comentario:

  1. Piluca11/1/11

    No todas las segudns oportunidades salen mal: yo lo dejé con el que ahora es mi marido durante un año, durante ese tiempo mantuve una relación con un hombre que además era padre. Cuanto más se consolidaba esa relación, más echaba de menos al que ahora es mi marido. Fue un año difícil, pero finalmente y tras más de diez meses sin hablar, cogí el teléfono, le llamé, le dije que antes de comprometerme con el otro hombre necesitaba saber que sentía él y entonces él me dijo que lo mismo... Desde ese día somos felices y creo que hay veces que se cumple lo de uqe "no se sabe lo que se tiene hasta que se pierde"... Y entonces, merece la pena rectificar.

    ResponderEliminar